23.3.11

Un amigo ocasional

Un amigo ocasional: Norman, tengo que confesarte algo. Estaba en la fiesta de anoche en el Upper East Side, y no conocía a nadie. Así que le dije a esta linda muchacha que yo era tú -estirando la hoja de un diario- (pausa) Después, me la llevé a casa. Nos metimos en la cama. Espero que no te enfurezcas por que usé tu nombre.

Mailer: ¿Te fue bien con ella?
Amigo: Sí. Fue bueno. Realmente bueno.
Mailer: Entonces, no me enfurezco.


Un arte espectral - Norman Mailer / Extracto